La verdad sobre los cuentos de Disney: lo macabro de los clásicos - Reportaje

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La verdad sobre los cuentos de Disney: lo macabro de los clásicos - Reportaje

Por Maribel Baena

El 16 de Marzo 2017 | 00:34

Los cuentos de Disney están mucho más edulcorados de lo que pudiéramos imaginar en un primer momento. Y es que la muerte de Mufasa no es nada al lado de los cuentos tradicionales.
La Bella Durmiente, una violación hecha cuento de hadas

En La Bella Durmiente, la historia que se cuenta es la de una chica que es maldita desde el propio día de su nacimiento. Cuando cumpla los dieciséis años, la princesa se pinchará con una rueca y morirá; porque sus padres osaron no invitar a Maléfica a su presentación oficial (recordad: invitad a todos a la presentación de vuestro hijo). Para evitarlo, unas dulces hadas madrinas que había por allí se encargarán de cuidar de ella; además, una de ellas consigue cambiar su destino, dictando que, en lugar de morir, dormirá hasta que alguien la despierte con un beso de amor. Su vida pasa y, efectivamente, acaba pinchándose con una rueca y quedando inconsciente. Pero un buen príncipe aparece un día por allí, dispuesto a acabar con todo el mal, y la despierta con un beso de amor verdadero.

Esa es la historia que ya conocíamos, la que Disney nos había transmitido. Pero, ¿qué hay de la original? Hay varias versiones, siendo la más conocida la de los hermanos Grimm. Pero la anterior, la escrita por el italiano Giambattista Basile, no tiene la misma trama exactamente. Aurora se llama Talía, no tiene madre, y no es que nazca maldita, sino que su destino es morir de esa forma. Al cumplir Talía su mayoría de edad, se encuentra con una hilandera, y cae muerta al clavarse una astilla de lino bajo la uña, tal y como habían predicho que pasaría.

Su padre no es capaz de soportar la tristeza, y prepara para la princesa un lugar de descanso en medio del bosque; tras eso, desaparece. Talía descansa en el bosque, en un estado que no se sabe si es la muerte o el sueño eterno, hasta que un buen rey decide pasar por ahí. La ve, inocente, hermosa y, sobre todo, inconsciente, y decide darle un beso para despertarla. El beso acaba llevando a otra cosa y, finalmente, el rey (que luego se acaba descubriendo que ya estaba casado) viola a Talía. A los nueve meses, Talía dio a luz a dos preciosos mellizos; uno de ellos, al chuparle el dedo, extrae la astilla envenenada que había provocado en Talía el sueño, y ella despierta. Nada de beso de amor verdadero. Imaginad el shock de la pobre princesa al despertar de esa forma...

Aunque ahí no acaba todo. La esposa del rey trata de quemar viva a Talía, además de comerse a sus hijos cocinados. Por "suerte", el rey consigue pararlo todo, y al final Talía se libra de la muerte. Igual de bonito que la Bella Durmiente, ¿eh?

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