11 preguntas que nos hacemos tras Madrid Games Week 2015, la anti-crónica a la feria

ANTOCRÓNICA

Por Benjamín Rosa Fernández

El 16 de Octubre 2015 | 19:13

No hablamos de las colas y los juegos que nos han gustado, sino que hablamos de mucho más.

¿Merece tanto la pena moverse para jugar a juegos antes de su salida?

En su primera edición efectuada en 2010 y cuando el evento aún era conocido como GAMEFest, la respuesta era un innegable "". La sola idea de que se hiciese un evento dedicado a mostrar juegos antes de su salida era un sueño hecho realidad, y muchos jugadores que se desplazaron allí para poder jugar a la versión de prueba de un 'The Legend of Zelda: Skyward Sword' para Nintendo Wii que saldría al mercado un año después.

Pero han pasado ya cinco años desde entonces y el mercado ha cambiado mucho, sobre todo a la hora de mostrar juegos a los usuarios. En primer lugar, la aparición de los servicios de streaming y la normalización de los gameplays caseros ha hecho que tanto medios como los propios desarrolladores puedan mostrar al público los juegos aún no lanzados tanto como quieran, y luego están las betas abiertas que pueden probar casi todos los usuarios.

Novedades de la feria y el poder de la misma

Varios de los juegos que más colas tenían eran aquellos que iban a tener periodo de beta en nada, como 'Star Wars: Battlefront' o incluso 'Dark Souls III', y no hablemos de los que salen en una semanas como 'Assassin's Creed Syndicate' y 'Call of Duty: Black Ops III'. Si bien ha ayudado mucho el adelanto de fechas para que la feria suceda a principios de octubre, no quita que el tener casi cuatro meses de retraso frente al E3, y dos frente a la Gamescom cuando las betas públicas son algo a la orden del día para la gran mayoría de juegos importantes, le quita gran parte de su encanto a una feria que nos brinda la oportunidad de jugar a juegos antes de su salida.

Eso sí, por lo menos la sección de Made in Spain Games se ha convertido ya en la favorita de muchos usuarios dado que es la primera vez que se podían probar juegos muy prometedores, mucho antes de que lleguen al mercado. Cuesta creer que la sección de indies españoles haga mejor su trabajo que muchas grandes empresas.

¿Es necesario relacionar otros elementos de ocio con los videojuegos?

Puede que la pregunta esté extrañamente planteada, pero voy a tratar de explayarme. Madrid Games Week es una feria cuyo foco principal e indiscutible son los videojuegos, una industria que en España lucha por tener su propia identidad, que aún a día de hoy es considerado infantil por muchos sectores y con inversiones escasas por parte de empresas e inversores españoles.

Pues bien, desde el año pasado lleva poco a poco acogiendo stands que no tiene por qué ver con videojuegos, como el de Just Eat que tenía un casting para salir en el vídeo de Yellow Mellow, una youtuber que no trata sobre videojuegos como algo principal. Éste año se ha expandido mucho éste concepto, como un espacio de combate estilo laser tag que ocupó medio pabellón de eSports, uno de práctica de airsoft, y la zona de Manga Experience, que del Expomanga trajo un escenario, la exposición que mucha gente obvia, varios dibujantes aceptando encargos nada baratos pero de los que se comenta que hicieron su agosto, los stands comerciales con merchandising de animes y la cúpula de promoción de survival zombie. Luego, muchas tiendas habituales a los eventos de anime y manga que iban por libre como los de dulces y chocolates a precio de tienda de aeropuerto. Todo ésto son elementos que tocan los videojuegos por la tangente o incluso ni eso y diluyen mucho la idea de que es una feria dedicada a los videojuegos principalmente, y empieza a sufrir los síntomas de muchas ferias de éste tipo que acogen todo tipo de ocio juvenil más que una feria a la cultura del cómic.

Manga Experience

También, parte del público parecía que trataba la feria como si fuese un Expomanga o Japan Weekend, con cosplays (muy currados eso sí) de series de anime que no tienen videojuego, carteles de "regalo abrazos" entre otras lindezas de vergüenza ajena como que "El yaoi dominará el mundo", y ese público pagó los 12 euros de entrada. Igual aquí soy muy puritano y cuando voy a una feria de videojuegos quiero contenido centrado en videojuegos dado que para si quiero merchandising de anime y películas ya tengo cuatro ferias de éste tipo en Madrid, y la última sucedió dos semanas antes. Sería como ir al E3 esperando que anuncien novedades de películas de Marvel y que una editorial anuncie la llegada del manga JoJo's Bizarre Adventure: Steel Ball Run, que por poder se podría hacer, pero no es a lo que uno va a la feria ni para lo que se pensó en su día.

¿Qué habría sido de la feria si AEVI hubiese puesto control al contenido de stands promocionales y muchos no se hubiesen aceptado por no tratar directamente videojuegos? Posiblemente, quitando el colchón financiero para AEVI que aportan los que alquilaron el espacio, el usuario se habría perdido poco y los espacios habrían sido sustituidos por otras tiendas de componentes, habrían ido otras distribuidoras menores aprovechando precios de alquileres de última hora y las tiendas habrían tenido que cambiar su catálogo para ofrecer sólo merchandising de videojuegos.

Artículos recomendados