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Lecciones que nos ha enseñado esta temporada de 'Juego de Tronos'

MI GUARDIA HA TERMINADO

Lecciones que nos ha enseñado esta temporada de 'Juego de Tronos'

Por Sonia Sarria

El 24 de Mayo 2019 | 19:00

El controvertido final de 'Juego de Tronos' deja consigo unos mensajes igual de controvertidos... y bastante pesimistas. Este es el motivo por el que los fans se encuentran tan enfadados.

Han pasado nueve años, pero por fin ha llegado el momento: 'Juego de Tronos' ha terminado. La serie más icónica de la era dorada de la televisión ha visto su fin este fin de semana, y se ha asegurado de que no la olvidemos jamás... más para mal que para bien. Y es que este final, junto con la temporada ocho en general, pasará a la historia como uno de los peores que se han emitido, destronando quizás incluso al de 'Lost'.

Y es que el gran problema que los fans han visto a 'Juego de Tronos' es el destrozo que al que David Benioff y D. B. Weiss han sometido a sus propios personajes. Desde Daenerys hasta Theon, supervivientes y caídos han actuado de tal forma que nos han hecho chirriar los dientes a muchos, y enfadado a muchísimos otros. El descontento ha llegado hasta el punto de exigir que se rehaga toda la temporada, algo que nunca se había visto —y que es bastante estúpido a mi parecer, pero no vamos a hablar de esto—.

Nos haya gustado el final o no, es innegable que ha habido ciertos problemas con el foreshadowing y el desarrollo de personajes. Puesto el punto final a la serie, 'Juego de Tronos' nos da a través de sus héroes y villanos unos mensajes un tanto... preocupantes.

Daenerys Targaryen

Dany T8

La Madre de Dragones ha caído en desgracia en esta temporada. A lo largo de toda la serie se ha ido insinuando que no sería una buena reina para Poniente, pero los últimos episodios han sido decisivos. Si hemos aprendido algo con ella es que no importan tus valores ni tus principios: estás condenada a ser como tus padres. Da igual que no los conocieras, da igual que pusieras todo tu empeño en ser distinta a ellos, a forjar tu propio nombre. Todos tus sacrificios y pérdidas a la larga son inútiles. Todas tus buenas obras también. Al final, nada de eso importa. Sólo hay fuego y sangre.

Como mujer, siempre van a verte como alguien inestable y, por supuesto, al final se demostrará que lo eres. Cualquier hombre va a ser mejor que tú por el simple hecho de serlo, aunque sea sólo porque lo dicen los demás. Y todos tus intentos por demostrar lo contrario no harán más que hundirte hasta el punto de que si dicho hombre te mata, será un alivio para muchos.

Jon Nieve

Jon T8

Ser una persona decente equivale a ser estúpido e ignorante. Peor que ignorante: alguien que se niega a ver la realidad a propósito. Los conceptos del bien y del mal nunca han sido tan fáciles de distinguir como el blanco y el negro, pero llegamos a un punto en el que podemos justificar el asesinato en masa... con el poder del amor. ¿Qué ha sido de dar una muerte rápida y digna a un enemigo antes de dejar que lo asen las llamas?

Luchar por la paz es una pérdida de tiempo. Creer que las personas pueden trabajar unidas, por muy distintas que sean, es una pérdida de tiempo.

Jaime Lannister

Jaime T8

No puedes mejorar. Por mucho que avances, por mucho que construyas un futuro mejor siempre volverás al principio, a la peor versión de ti mismo. De la misma manera, tampoco puedes escapar a una relación abusiva. Maquíllala con amor si así lo prefieres, o con destino, pero lo que está claro es que morirás antes de poder rehacer tu vida de cualquier otro modo.

Pero eh, no es culpa tuya. Es simplemente que el mundo es así. ¿Para qué esforzarse? Tampoco es que haya que ir tan lejos como para... no sé, sentir remordimientos por tus malas acciones o intentar remendarlas pagando algún tipo de castigo.

Tyrion Lannister

Tyrion T8

De nuevo, el mundo es un lugar horrible y no vale la pena luchar por nada: en el mejor de los casos, te decepcionarán. No creas en nadie, ni siquiera en ti mismo; abandónate al cinismo, a tu método de escape de la realidad favorito, y deja que lo que tenga que pasar pase. Como la vida es injusta, lo más probable es que las cosas buenas lleguen sin necesidad de que hagas nada.

Cuanto menos esperes del mundo, menos disgustos te llevarás. De todos modos, tampoco es que el mundo haya esperado nada de ti. Limítate a seguir las corrientes más favorables, sin principios. No te hace falta nada más que una copa de vino en la mano y un par de comentarios sarcásticos preparados en la punta de lengua.

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