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Guía para principiantes en 'Sekiro: Shadows Die Twice'

PRIMEROS PASOS

Guía para principiantes en 'Sekiro: Shadows Die Twice'

Por Roberto Pineda

El 26 de Marzo 2019 | 18:20

¿Acabas de llegar a Japón y te hacen la vida imposible? Te ayudamos a sentirte cómodo en el peligroso mundo de 'Sekiro: Shadows Die Twice'.
Sekiro

Investiga todos los objetos: Nadie debería deciros esto, pero por si acaso, la cantidad de objetos útiles que hay es muy elevada y algunos pueden marcar la diferencia. Los dulces —en sus distintos tipos— potencian el ataque, la resistencia a la rotura o el daño a la misma y a veces pueden ser la solución a ese enemigo para el que pensáis que os falta un puntito extra debido a su poder defensivo u ofensivo. Tampoco está de más prestar atención al aceite, que puede ser combinado con la prótesis de fuego o las bombas de humo, capaces de aturdir brevemente a grupos de enemigos. En 'Sekiro' todo importa, porque todas las situaciones son muy exigentes y hay veces en las que usar un objeto ideal para la ocasión puede marcar la diferencia.

Virtud, un talento indispensable: En cuanto accedáis al árbol de habilidades llamado "artes del templo", resulta imprescindible desbloquear esta rama de talentos llamados "virtud", ya que aumentan el sen (dinero) obtenido de forma sustancial derrotando enemigos.

El ninja de los 784 puntos de experiencia:

Podría ser que una actualización modificara esto, pero mientras tanto, y siempre que hayáis alcanzado la Aldea Mibu, hay un ninja que os brindará 784 puntos de experiencia, ideales para desbloquear habilidades, cada vez que le derrotéis ¿Lo mejor? Que podéis aniquilarlo con un golpe por la espalda y reaparece junto al ídolo de la zona, río abajo. Hasta ahora, el mejor lugar para farmear puntos de experiencia de una manera segura, rápida y muy pero que muy satisfactoria.

Escamas de carpa: Cuando estéis en el agua veréis dos tipos de carpa: una anaranjada y huidiza y otra más oscura y hostil. La primera es la que os interesa, ya que al acabar con ella dejan caer su escama y estas son la divisa que emplean ciertos mercaderes que os venden objetos muy interesantes. En cuanto a las segundas, podéis acabar con ellas pero la recompensa es prácticamente inexistente.

Los jefes finales, en orden correcto: Hay ocasiones en las que tendréis acceso a un par de jefes finales a la vez. Esto suele pasar cuando no podéis con uno y decidís explorar otra zona. No obstante, si están ordenados es por algo y hay que tener en cuenta que matarlos es el único modo de aumentar permanentemente la estadística de ataque. Por cierto, no os olvidéis de los jefes secundario (ni los confundáis con los mini jefes), porque dejarlos vivir y perder su recuerdo de combate es malgastar un valioso aumento ofensivo para Lobo.

¿Miedo al terror?: Deberíais tenerlo. Se trata de un estado alterado que si os envuelve por completo os causa muerta inmediata, independientemente de si los golpes s han restado salud o no. Hay ciertos mini jefes, hechizos y algún que otro jefe final capaz de provocarlo, siendo peores los mini jefes ya que hay algunos que lo usan constantemente. Lo mejor es mantenerse alejados del aura oscura, aunque si la situación exige "mojarse", nada como usar un objeto que lo reduzca, ya que si no lo hacéis es muy probable que no podáis soportarlo y acabéis perdiendo la vida incluso si hacéis un combate perfecto. Por suerte, no son muchos los enemigos capaces de infligir este "terrorífico" estado.

Estudiad las posibilidades de la prótesis: Puede que Lobo no cuente con dos brazos naturales, pero la prótesis no está tan mal. Hay una gran cantidad de herramientas que podéis adherirle, siendo posible equipar un máximo de tres. Desde un sombrero capaz de bloquear disparos enemigos, hasta un abanico que logra que los enemigos se den la vuelta y olviden que os han visto, pasando por la posibilidad de aturdir a los enemigos con petardos, quemarlos con un lanzallamas o envenenarlos con una ráfaga de cortes tóxicos. Investigad bien cada escenario y tratad de encontrar todas las herramientas y, por supuesto, no olvidéis que estas pueden ser mejoradas en el Templo Desolado gracias al trabajo del Escultor de Ídolos. Es cierto que 'Sekiro' es un título que premia la perfección del jugador con la espada, pero la ayuda extra que os brinda la prótesis puede ser un auténtico salvavidas en más de una ocasión.

Cuidado con los símbolos rojos: Seguro que os pasado; veis un signo rojo y el enemigo os hace mucho daño, ¿verdad? Seguramente no hayáis sido capaces de evadir un ataque imparable. Se llaman así porque no pueden defenderse —casi nunca— como los demás golpes normales. Cuando aparezca este símbolo acompañado de un sonido inconfundible, debéis estudiar el movimiento de vuestro rival: si corre hacia vosotros para lanzar una embestida pulsar círculo para pisar su arma y dejarle expuesto. Si, por el contrario, intenta agarraros o ejecutar un barrido, estáis obligados a saltar o dar un paso lateral, respectivamente. Casi todos los enemigos del juego, incluidos los jefes cuentan con este tipo de habilidades y, en líneas generales, no saber identificarlos hace que lograr la victoria sea prácticamente imposible.

Índice de contenidos
  1. - Primera parte
  2. - Segunda parte
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