PIXEL WARS

RETRO 'Star Wars' para consolas de 8 bits, continuamos nuestra retro-semana especial sobre Star Wars

Ya llegó a los cines la nueva película de Star Wars, y para celebrarlo os vamos a ofrecer un par de retroanálisis muy especiales. Aquí tenéis el segundo de ellos.

Por Alberto Carmona 20 de Diciembre 2015 | 16:15

En 1991 llegaba a Japón y América la adaptación para NES de la primera de las películas de la saga Star Wars, y un año más tarde la recibíamos en Europa junto con una conversión más que aceptable para Game Boy. Ya en 1993 las consolas de 8 bits de Sega también acogían el título, primero Master System con una versión mejorada, y después Game Gear con lo que podríamos llamar la edición definitiva del juego, ya que incluía nuevos niveles. En total fueron cuatro las versiones diferentes de este título que vimos en consolas de 8 bits, cada una con su propio encanto que la hacía especial.

Pixel Wars

Hace mucho tiempo, en una galaxia muy, muy lejana... Bueno, quizá no tan lejana. Pero si hace ya tiempo, concretamente a principios de los años 90. Entonces las nuevas consolas de 16 bits comenzaban a dominar la galaxia, mientras que los viejos sistemas de 8 bits mordían lentamente el polvo estelar. Los ecos de su legendaria batalla se apagaban, y una nueva generación tomaba el relevo. Pero estos viejos artilugios aún iban a depararnos más de una sorpresa, la guerra contra el Imperio galáctico se iba a recrear una vez más, y lo iba a hacer con muchos pixeles de por medio. Puede que Luke Skywalker no tenga rostro, que C3PO sea aún más rígido que de costumbre, o que el Halcón Milenario no esté a la escala correcta. Pero estos entrañables gráficos ochobiteros todavía eran muy capaces de hacernos sentir dentro del universo de Star Wars. ¿Sobremesa o portátil? Tú decides. Pero elijas lo que elijas, la Fuerza de los 8 bits estará ya contigo, siempre...

Aunque ha habido juegos de Star Wars desde principios de los 80, las consolas de 8 bits de Nintendo y Sega tardaron una década en recibir esta saga. No obstante, Famicom (la NES japonesa) si que tuvo un juego de Star Wars en exclusiva que jamás salió de Japón. Este título creado por Namco hacía gala de una más que dudosa fidelidad a la franquicia, pero afortunadamente este no es el caso del juego que hoy nos ocupa, ya que recrea bastante bien el universo creado por George Lucas.

Las versiones para NES, Master System, y Game Boy, son prácticamente iguales en su planteamiento y desarrollo de niveles, salvo lógicamente por las diferencias marcadas por el hardware de cada consola. La conversión para Game Gear por el contrario incluye elementos propios que la convierten probablemente en la mejor versión de las cuatro, y es que cambia prácticamente todo el principio del juego, ofreciendo más niveles y recreando con mayor fidelidad el comienzo de la película original.

El sistema de juego es el mismo en todas las versiones, nos encontramos frente a una aventura de acción y plataformas en el que debemos recorrer niveles con scroll lateral mientras disparamos a distintos enemigos y saltamos de acá para allá. Algunos de estos saltos están bastante ajustados, y si fallamos podemos vernos atrapados en un pozo sin fondo donde solo podremos esperar a que se nos vacíe el medidor de salud.

Han disparó primero

Podemos saltar más lejos cogiendo carrerilla, ya que el botón de disparo también nos permite correr si lo mantenemos pulsado. Esto también sirve para movernos más rápido, y esquivar mejor a los enemigos que se nos pongan por delante. Dichos enemigos no suelen morir con un solo disparo, por lo que deberemos machacar el botón para acribillarlos, o intentar pasar sorteándolos para evitar la confrontación.

Disponemos de un medidor de salud que se irá vaciando a medida que recibamos daños, y que podremos recargar recogiendo esferas de energía que están escondidas por los niveles. Con todo esto puede que la mecánica de juego os resulte muy parecida a la de 'Mega Man', con la diferencia de que aquí el movimiento del personaje es algo más ágil.

Otro elemento a destacar de este juego, es su componente aventurero. Por ejemplo al principio podremos recorrer el desierto de Tatooine a bordo del Landspeeder de Luke Skywalker, mientras observamos la acción con una perspectiva aérea. De este modo deberemos ir de una zona a otra, y podemos encontrar niveles no obligatorios con algunos secretos. Cabe destacar que esta parte del juego no es igual en la versión para Game Gear, debido a su particular comienzo.

Si exploramos bien cada fase, no solo podemos encontrar vidas y puntos extra, también podemos añadir nuevos personajes para jugar, como Han Solo y la princesa Leia. Si logramos encontrar a Obi Wan podremos añadir el sable de luz al armamento de Luke, que solo sirve para atacar cuerpo a cuerpo, pero con bastante contundencia. También aparecerán otros personajes como C3PO y R2D2, pero únicamente se limitaran a darnos consejos desde el menú del inventario.

Tranqui que yo piloto

Una cosa que llama la atención del juego es la variedad de situaciones que nos propone, y es que no todo va a ser plataformear, pues también hay niveles a bordo de naves disparando contra cazas enemigos, o escapando de un campo de asteroides. El último nivel es casi un matamarcianos de scroll vertical en el que manejaremos un caza X-Wing para destruir la Estrella de la Muerte, en dicho nivel también habrá que esquivar las paredes y los obstáculos que aparezcan.

A nivel gráfico la cosa cambia bastante dependiendo de en qué sistema lo estemos jugando, salvo entre las versiones de Master System y Game Gear que son bastante parecidas. No obstante el nivel de calidad es bastante aceptable en las cuatro versiones, y todo funciona más que correctamente. Además el diseño de niveles y personajes es aceptablemente fiel a las películas, y más teniendo en cuenta las limitaciones de los 8 bits.

Por descontado no podía faltar la banda sonora magistral de John Williams, que lógicamente varia según el sistema en donde estemos jugando, pero que mantiene un nivel de calidad realmente bueno en cada consola. Los temas musicales originales de la película se entremezclan con otros compuestos expresamente para el juego, que no solo gozan de buena calidad, si no que además casan bien con el estilo de los temas originales.

Llegados a este punto toca hablar de indeseados inconvenientes, y es que la dificultad del juego puede hacer tirar el mando por la ventana a más de uno. No es que sea más difícil que otros títulos de este tipo para estas consolas, pero si que hay partes capaces de crispar los nervios de los jugadores con menos paciencia. Y es que algunas trampas son un tanto "sucias", ya que están pensadas para acabar con nosotros si o si la primera vez que lleguemos.

Usa la paciencia, Luke

Las versiones para consolas de Sega permiten ajustar la dificultad, pero tampoco es que eso influya demasiado en la partida. Tenéis que tener en cuenta que se trata de un título "muy a la vieja escuela", por lo que los jugadores no habituados pueden desesperarse rápidamente. Si esto no es problema para vosotros, entonces este juego se convierte en algo bastante recomendable en cualquiera de los cuatro sistemas.

Si hubiese que apostar por una sola de las cuatro versiones, probablemente la más recomendable sería la de Game Gear. Sus niveles exclusivos merecen la pena, y aunque algunas partes como la del Landspeeder desaparecen, son reemplazadas por niveles completos a pie de gran calidad. Además cuenta con los gráficos mejorados de la versión para Master System, que suponen un salto importante con respecto al original de NES.

Para aquellos que quieran disfrutar de este juego en la actualidad, tenemos la mala noticia de que no hay reediciones de ningún tipo. Ni siquiera está el original de NES en la Consola Virtual, algo que si ocurre con los juegos de Star Wars para Super Nintendo. Tal vez los chicos de Lucas Arts se animen a reeditarlo, como han hecho recientemente con otros títulos clásicos de la saga. Pero de momento solo queda hacerse con los cartuchos y consolas originales, o tirar de emulación.

Una forma estupenda de disfrutar del universo Star Wars con el particular estilo de los 8 bits sin importar en que sistema lo juguéis, ya que os lo pasareis en grande en cualquiera de ellos. Un título variado y con un nivel técnico bastante bueno, al que la única pega que le podemos poner sería su elevado nivel de dificultad, no apto para todos los tipos de paciencia.