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Análisis de 'The Legend of Heroes: Trails of Cold Steel II' para PS4, ascendiendo a leyenda

CLASS VII

Análisis de 'The Legend of Heroes: Trails of Cold Steel II' para PS4, ascendiendo a leyenda

Daniel G. Astarloa Por Daniel G. Astarloa

El 6 de Junio 2019 | 12:00

La segunda entrega de la subsaga parte de la franquicia 'The Legend of Heroes' es un punto perfecto para engancharte a una de las mejores sagas JRPG del mercado.

Nunca he jugado a 'The Legend of Heroes'.

Esta no es una franquicia que haya pasado por debajo de mi radar. Tiene muchos seguidores a través del mundo entero y está aclamada como una de las mejores experiencias en el terreno del JRPG, especialmente en los juegos de combates por turnos. Cada día que pasa hay más detractores de este estilo de jugabilidad por considerarse lento y arcaico, pero tiene su atractivo entre los nostálgicos. Y en el centro de esa nostalgia se encuentra esta saga desarrollada por Nihon Falcomcon más de una decena de entregas a sus espaldas.

Tenía mi curiosidad con semejante trayectoria y las alabanzas de miles de jugadores de todo el mundo, pero francamente, daba miedo entrar en este tinglado. Una historia tan densa, un universo compartido tan grande, personajes y tramas que se cruzan entre entregas... Hay una razón por la que 'Final Fantasy' está coronado como el rey de los JRPG. O en su defecto 'Dragon Quest', que también se inclina por hacer punto y aparte con la mayoría de sus entregas. Ese es el mayor problema de esta franquicia. Y maldita sea si le he echo ascos por ello porque 'The Legend of Heroes: Trails of Cold Steel II' es una maravilla hecha para los fans del RPG por turnos.

Batalla

Conoce a tus compañeros

Me avisaron de que 'The Legend of Heroes: Trails of Cold Steel II' no era el mejor lugar para empezar con la saga, que en todo caso primero pasara por la previa entrega y entonces saltara a los sucesivos. Es hasta cierto punto cierto: la historia arranca nada más terminar el juego anterior, con una catastrófica derrota por parte del protagonista frente a un movimiento que ha llevado a la guerra civil al imperio que pretendía proteger con sus amigos. No se molesta en explicarnos los conceptos y bases que conforman este mundo. De hecho, la confusión es tal que empezamos con un mecha, un gato parlante y menciones de poderes extraordinarios de nuestro personaje que nada tienen que ver con nuestro alrededor.

Pero es fácil subirse al carro de la trama del juego. Antes de empezar tenemos una sección para relatarnos los eventos del juego anterior más o menos completos, además de un drama CD adicional. La presentación de personajes y lugares está estratégicamente planeada para no abordar al jugador con un exceso de información a lo largo de la progresión de la historia, y lo cierto es que el hecho de que todos los miembros de Clase VII se conozcan entre sí ayuda mucho a tener un ritmo nada pausado, siempre con un objetivo claro. Pronto conectas con estos guerreros de forma personal, dedicas más tiempo a entrenar con ellos y a acudir a eventos sociales especiales entre ellos.

Es cierto que hay momentos en los que nuevos personajes, lugares y conceptos pueden tenernos confundidos al principio. Puede que tener una wiki a mano no nos haga daño, quitando spoilers relevantes de futuros juegos. Pero a grandes rasgos es una situación que se puede llevar sin grandes problemas, así que en pocas horas nos engancharemos a la trama política y el drama humano que relaciona a los personajes con el mundo de Zemuria. Lo único que nos puede echar atrás es, como mucho, el hecho de que los textos del juego estén completamente en inglés.

Mundo

Límites en las fronteras

La jugabilidad que se presenta con 'The Legend of Heroes: Trails of Cold Steel II' es básica, pero efectiva. El tiempo pasa a lo largo de dos meses en el juego y cada uno de los días es clave para viajar a una nueva zona, pasar tiempo libre con nuestros compañeros o mucho más adelante en el juego revisitar parte del mundo. Si terminamos la partida se nos invita a revisitarla en una Nueva Partida +, pero por lo general las relaciones y cómo gestionemos el tiempo será lo que se quedará con nosotros en una primera partida.

Este planteamiento hace que las zonas que visitemos sean, en una primera instancia, algo pasilleras. Tenemos un camino que recorrer y hasta que no avancemos un poco más no se nos permite acceder a otras partes del mapa, incluso cuando se nos presenta algo enorme como praderas en las montañas. En cierto modo, cada capítulo de los actos que nos presenta el título son pequeños mundos abiertos: al principio se nos obliga a recorrer zonas concretas, después se nos permite explorar a nuestro gusto, cumplir misiones secundarias e incluso explorar templos opcionales que pueden profundizar en el lore del universo que habitamos y nuestro papel real en él.

Da miedo cuando nos toca avanzar en la historia, porque significa dejar atrás la zona en la que hemos estado y abandonar con ello posibles misiones que no hayamos descubierto, zonas secretas y lo más importante: nuestra zona de comfort. Acostumbrarnos a estos mapas semiabiertos para saber que los dejamos atrás se hace duro. Pero es un sentimiento muy bien planteado, pues nos ayuda a compartir este viaje con nuestros protagonistas: están dejando atrás esos lugares al igual que tú, y para ellos tampoco debe ser fácil. Pero la historia tiene que progresar. El mundo te necesita. Y aunque sea difícil, haces lo correcto.

Socializar

Lucha por tus amigos

Como RPG por turnos está claro que 'The Legend of Heroes: Trails of Cold Steel II' tiene una serie de cartas con las que jugar que pueden limitarlo como hacerlo sentir especial. Tenemos dos aspectos de los que hablar en este apartado: en primer lugar tenemos los combates tradicionales, los cuales son más complejos y profundos de lo que esperaríamos de otros juegos semejantes. Nuestras relaciones reforzadas, magias especiales, habilidades, equipamientos concretos... Todo nos facilita un sistema de batalla que podemos explotar a nuestro favor con mucha facilidad, especialmente considerando que el juego arranca desde el Nivel 40. Con un poco de práctica es fácil pillar el gancho a la mayoría de batallas y saber manejarte tanto con enemigos normales como con los más grandes del lugar, pudiendo aniquilarlos como si fuesen un chiste en la dificultad normal. Pero una vez te adentras en el modo Pesadilla poca broma te parecerá el título: debes ir preparado para el más pequeño de los encuentros y aprovechar al máximo las herramientas que se te facilitan.

Los jefes finales sobresalen en este sentido, ya que el juego poco se cortará en lanzarte de lleno a combates que perfectamente pueden superar tus posibilidades. Las batallas contra nuestros principales enemigos nos pondrán contra la pared en más de una ocasión y no aceptan que vayas sin una estrategia de por medio, especialmente si quieres cumplir las condiciones especiales secretas que incluyen dentro de sí como alcanzar la victoria antes de que pasen X turnos. Son uno de los elementos más potentes en la jugabilidad, sin lugar a dudas.

Donde el título no termina de acertar del todo es en los combates con el mecha. Son pocos, en momentos críticos y extremadamente simples, con un sistema de piedra papel tijera que consiste en el prueba y error y, como mucho, hacer un uso correcto de las habilidades especiales de nuestros compañeros. Son prometedores, pero no alcanzan el potencial que en un primer momento parece que mostraban.

Magnífico

Conclusiones

'The Legend of Heroes: Trails of Cold Steel II' es un título fantástico, uno de los mejores JRPG que encontrarás en PS4 sin lugar a dudas. Quizás sea mejor empezar por la anterior entrega, pero que no eche a nadie atrás por ello: podéis empezar por aquí y engancharos a la increíble historia que se está desarrollando en los siguientes juegos. He pasado años evitando esta increíble saga y ahora tengo que recuperar el tiempo perdido con anteriores entregas. Absolutamente indispensable si amas el género.

9,0

Lo mejor:

- Gran trama política y personajes.

- Combates por turnos intensos y profundos.

- Estupendos jefes finales.

Lo peor:

- Mapas algo cerrados en su diseño.

- Batallas con el mecha algo sosas.

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