Última hora Carlos III regresa al trabajo

Comienza a buscar un nuevo mazo de 'Hearthstone', se acabaron los Parroquianos

¿BUSCAS PELEA? YA NO CUENTES CON ELLOS

Por Pedro Herrero

El 14 de Octubre 2015 | 12:41

El inminente nerfeo de Comandante Grito de Guerra pretende acabar con la proliferación de uno de los mazos más frecuentes del juego.

Al grito de "¡Vamos, todos juntos!", el mazo Grim Patron -o Parroquiano Lúgubre- se ha convertido en uno de los más populares de 'Hearthstone' en los últimos tiempos, tanto en juego con rango como en torneos. Blizzard ha estado al tanto de ello, y ante las peticiones de la comunidad, ha nerfeado una carta clave en dicha baraja: Comandante Grito de Guerra.

A partir de ahora, ya no tan juntos

Recordemos que Comandante Grito de Guerra otorga Cargar -ataca según entra en mesa- a cualquier esbirro con un ataque igual a 3 o inferior, lo que incluía al Parroquiano Lúgubre y al Rabioso Demente, las otras dos cartas en las que se basaba este mazo. A partir de ahora, la habilidad de Comandante Grito de Guerra cambia radicalmente, pasando a otorgar un punto más de ataque a los esbirros que ya tengan Cargar.

Hearthstone

El mazo de parroquianos estaba planificado sobre dos combos claros: uno con Comandante Grito de Guerra más Parroquiano Lúgubre más cualquier hechizo que hiciera un punto de daño a todos los esbirros, lo que tenía como efecto la generación automática de más Parroquianos. El otro, también con Comandante Grito de Guerra, Rabioso Demente, más otro hechizo del mismo tipo que el anterior, lo que hacía que el Rabioso tuviera una cantidad de puntos de ataque que podía llegar a cantidades por encima incluso de 20. Desde el momento del nerfeo, cualquiera de estas dos posibilidades queda desechada.

Seguirá siendo posible invocar a más Parroquianos, o poner a tope al Rabioso, pero ya no tendrán Cargar, con lo que el rival tendrá al menos un turno para reaccionar a ambos combos. Fue divertido mientras duró, sobre todo para los que lo jugaran -para el que lo sufre no tanto-, pero hasta aquí llegó este célebre -y eficaz- mazo de Guerrero.

Artículos recomendados