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Análisis 'LEGO Worlds' para PS4

CONSTRUYE Y DESTRUYE

Análisis 'LEGO Worlds' para PS4

Daniel G. Astarloa Por Daniel G. Astarloa

El 23 de Marzo 2017 | 15:45

Tratamos de estudiar a fondo el nuevo título de TT Games, que nos invita a explorar y construir cientos de mundos LEGO.

'LEGO Worlds' no es 'Minecraft'. Una comparación así puede resultar una extraña manera de comenzar un análisis, pero es fundamental para comprender lo que sucede con este título. Lo más probable es que no veáis una crítica del juego de TT Games sin que haya al menos una mención del gran título que fue aquel de construcción y supervivencia; pero eso no significa que uno sea mejor que el otro, o que compitan en el mismo ámbito. De hecho, no podrían ser más diferentes.

Este es un videojuego sobre las maravillas que podemos ver en un mundo completamente creado con LEGO. Todo lo vivimos a nuestra pequeña estatura, construimos a nuestro placer, o destruimos el paisaje para ver bloques volar por los aires. La filosofía de 'LEGO Worlds' no es ofrecer una aventura de supervivencia y construcción: es la de la libertad y el regresar a una época en la que un puñado de bloques no eran un puzle, sino un mundo de posibilidades.

Diversión con los amigos

Llegar a ser el mejor

La base de este título es sencilla. Eres un astronauta, un viajero del espacio que atraviesa la galaxia con un noble objetivo: aprender todo lo que haga falta para dominar el arte de unir las piezas de LEGO y convertirte en un maestro constructor. Para ello tienes tu fiel nave a tu cargo y una serie de herramientas que te ayudarán a colocar piezas una a una, colorear construcciones o descubrir y replicar los personajes, animales y fauna que encuentres en cada uno de los biomas que encuentres en la infinita posibilidad de mundos que te encontrarás.

En vez de lanzarte directamente a la aventura y dejarte construir a diestro y siniestro el juego te separa en dos tutoriales: uno corto compuesto por tres mundos de reducido tamaño que deberás visitar y cumplir una serie de misiones cortas para hacerte con los controles básicos. No es una mala manera de comenzar y el narrador ayuda a que esta travesía se haga más amena, con la mismísima voz de Alfonso Vallés que le da todo un toque de humor y amor que quizás lo haga más especial.

A partir de aquí tienes en teoría plena libertad para hacer lo que desees, aunque esto no es del todo cierto. Esta segunda parte del juego es un tutorial oculto que te invita a ir desbloqueando mundos cada vez mayores y algunas funciones extra a medida que logras bloques dorados hasta alcanzar los cien: puedes hallarlos en cofres, realizando misiones y salvando ciudadanos en peligro de ser atacados. Es una dinámica que puede antojarse apetecible durante las primeras horas, pero que falla al entrar en profundidad: sin darse cuenta el jugador acaba repitiendo una serie de acciones de forma indefinida hasta lograr el preciado número de bloques, y tras tanta repetición los últimos pueden provocar más de una tarde de frustración en su búsqueda.

Dragones, magos y muchas posibilidades

Es tu destino y misión

El gran fallo en el que uno puede caer es pensar que el juego se resume en recoger esos bloques dorados. Es algo normal, recordando que en otros títulos de TT Games el objetivo siempre ha sido recoger todos estos elementos en forma de coleccionables para dar por finiquitado el título de turno al haberlos recolectado todos. Pero no os dejéis engañar: si están aquí es para decorar el juego. Dedicarse a buscarlos y dar por concluidas las posibilidades de este mundo abierto es un error.

Su potencia no se encuentra en la aventura, sino en nuestra imaginación y paciencia. Durante el juego nos encontraremos con unas traviesas criaturas verdes que huirán con bloques de LEGO; al capturarlos nos entregarán el susodicho y será el momento en el que podamos usarlo para nuestras propias construcciones. Este debe ser el principal objetivo a perseguir por parte de los jugadores, pues lo que permiten al fin y al cabo es la libertad que necesitamos para construir.

Porque esa es la magia de 'LEGO Worlds', la capacidad de recrear e inventar tus propias creaciones. Podemos conseguir sets ya construidos de diferentes construcciones que podemos usar para nuestras ciudades y reconstrucciones; pero también para estudiar nuestro ambiente, intentar imitarlo y así aprender importantes lecciones de cómo se deben hacer las cosas en el idioma de los bloques de colores. Porque recordad que toda construcción hecha en el juego se puede traducir al mundo real si cuentas con las piezas necesarias.

Cientos de lugares que construir

Viajar a cualquier lugar y rincón

Esa es la gran concesión de 'LEGO Worlds', pero por desgracia no sabe aprovecharse más allá de ello. Si no entramos en la tentación de construir el juego carece de la gracia de otros títulos licenciados: no sabe mantener el interés del jugador tras varias horas de juego. Y es un error muy grave recordando que estos son los extras y mejoras que se le han agregado al título para dejar el estado de early access en el que salió al mercado hace dos años para PC.

Investigar los mundos visitables para encontrar los diferentes biomas que puede generar el título es algo que invita mucho a las ganas de explorar al principio, pero una vez visto por primera vez uno de estos lugares acabamos cayendo en la cuenta de que apenas existe variedad y gracia en cada una de las áreas posibles. La generación de mundos aleatorios no nos hace sentir como que hemos descubierto un sitio ppor primera vez, sino que nos da la sensación de que ya hemos estado ahí. Esto hace que la exploración se vuelva repetitiva tras las primeras sesiones de juego, un importante pecado que no puede cometer este tipo de aventuras.

Y es que si fuera de la construcción no encontramos nada divertido para hacer el juego se queda cojo. Podemos dedicarnos a coleccionar las armas, personajes y ambiente que podemos lograr, o apuntar hacia ese trofeo casi imposible de superar las mil millones de piezas recolectadas; pero es inevitable darse cuenta de que estaremos haciendo lo mismo y sin mayor profundidad que la de rebuscar como quien rebusca entre su enorme baúl de LEGO esa pieza pequeña del color y tamaño exacto que necesita para el siguiente paso de su construcción.

Mundos e imaginación

Conclusiones

Existe esperanza de que el juego añada todavía más cosas de interés en el futuro para hacer la aventura mucho más entretenida. TT Games ya ha declarado su intención de apoyar a la comunidad con actualizaciones que expandan las oportunidades del juego durante al menos un año, así que es pronto para juzgar el título en todo su potencial. Por desgracia, la versión con la que contamos en la actualidad no tiene toda la fuerza que debería.

'LEGO Worlds' acierta en la idea que tenía en su early access, pero falla en los extras añadidos para su versión completa. Aquellos muy metidos en el mundo de los bloques de plástico y que les encante la construcción podrán encontrar toda una delicia echando horas y horas para hacer los mejores mundos posibles e invitar a sus amigos a que los visiten y mueran de envidia, con el consecuente riesgo de que lo destruyan todo a su paso. Pero quienes busquen aventuras y experiencias más enfocadas a la acción deberán buscar en otros títulos licenciados de la franquicia: este es un juego muy cerrado para un público específico.

Analizada versión de PS4 en una PS4 estándar.

6,5

Lo mejor:

- Auténtica oportunidad para crear lo que sea con piezas LEGO

- Multijugador online y local muy divertido

- Doblaje del narrador muy acertado y divertido

Lo peor:

- Coleccionables poco atractivos tras unas horas de juego

- La exploración se torna repetitiva tras pocos mundos visitados

- Necesidad de recoger todos los bloques para construir con completa libertad

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