Análisis de 'Disney Dreamlight Valley', fuera del early access y adentro con el prémium

Echo en falta los juegos cozy de Disney. Hubo una época en la que la compañía de animación dedicaba una buena parte de sus recursos a la industria del videojuego, colocando sus propiedades intelectuales como un punto importante en la historia del medio. No hablo de los fantásticos títulos third party más conocidos como 'Patoaventuras' de Capcom o 'Kingdom Hearts' de Square Enix, sino de los títulos más pequeños. 'World of Illusion' o 'Mickey's Speedway USA', por ejemplo.

Aquellos juegos demostraban la flexibilidad de Disney en los videojuegos. Podías tener una siniestra aventura 3D como 'Epic Mickey' en un momento y saltar a un hack 'n slash con 'Pesadilla antes de Navidad'. Carreras, plataformas, todo lo que imaginaras estaba al alcance de los icónicos dibujos animados. Y juntar las icónicas franquicias para un crossover es claramente una idea que muchas desarrolladoras tuvieron, pero no supieron ejecutar como es debido. Ahora que Disney está más apagada en el medio parecen tiempos lejanos.

Hubo una pequeña franquicia que significó mucho para mí como jugador. Es la que mejor supo aprovechar todo este infinito terreno y, pese a todo, le cortaron las alas demasiado pronto. Daba por sentado a mi edad que nunca veríamos ese potencial completado. Pero aquí viene Gameloft con una inspiración sacada de esa saga y varios proyectos capaces de sacarme de nuevo cientos de horas. 'Disney Speedstorm' por un lado, cuyas glorias ya bendecí en su análisis, y el juego base de 'Disney Dreamlight Valley'.

Debería ser estúpido querer cruzar a Stitch con Úrsula y preguntarte qué clase de interacciones tendrían. La respuesta es esa caja de arena pequeña que me aportó en su día aquella franquicia abandonada. Qué queréis que os diga. Soy un niño de nuevo: vuelvo a tener ilusión por Disney.

'Disney Dreamlight Valley'

Vuelta a la infancia

La propuesta de 'Disney Dreamlight Valley' tiene poco de básica. Parece simple en su arranque: el reino de tus personajes favoritos está asolado por una amenaza oscura, y sólo tú y tu magia podéis restablecer su luz. Ayuda a Mickey, Merlín y Goofy a curar el valle paso a paso, día a día. Arrancar maliciosas espinas, plantar verduras, pescar... Lo que te venga en mano. Y por supuesto, desarrolla una amistad duradera con energéticos vecinos.

Es una trama que te hace bajar la guardia y casi ponerte en modo automático. Los diálogos de los primeros vecinos son algo genéricos, siendo sinceros. Pero poco a poco avanzas y encuentras personajes más atrevidos en lo que te cuentan. Los villanos son un claro ejemplo, con Úrsula a la cabeza para hacerte replantearte cuánto puedes juzgar a alguien de antemano. Empiezas a ver algo de magia en lo que te quiere decir Wall-e cada mañana, y te ríes cuando regañas a Scar por ser un gatito malo. Te sumerge en bienestar y buen ambiente, no en nostalgia básica.

Y avanzas en la historia y te pegan la puñalada trapera. No entraré en spoilers severos, pero el juego te da una advertencia mental y se la gana. Simpatizas con el villano y, de hecho, reconoces mucho de lo que expresa en jugabilidad con tu desarrollo como persona a través de los años. Tu relación con algo infantil como Disney, los cuidados físicos y mentales, el mal trago de crecer. El argumento golpea fuerte como persona adulta.

Es raro decir de un título de simulación y relajación que su punto fuerte esté en el guion, pero es un punto que defiendo con escudo y espada. Los diálogos con los vecinos, las subtramas que tienen asignadas y el modo de guiñar el ojo a su comunidad en ciertos momentos es más que sólido. En efecto, Minnie, fue demasiada arcilla. Y con cada actualización que pasa parece que tienen algo más que aportar en este apartado.

'Disney Dreamlight Valley'

Tu valle, tus normas

Tu objetivo es recuperar el reino de Disney a su antigua gloria, y eso se hace de bioma en bioma. Cuanto más avanzas, más amistad desarrollas y más dinero ganas, más se te permite avanzar en el mapa y hacer tu valle más grande. Es una progresión lenta y donde más se nota que originalmente había un plan de sacar el juego como Free to Play: exige mucha dedicación por parte del jugador, al menos hacerlo con el día a día en mente.

Merece la pena por desbloquear más vecinos y, por supuesto, más espacio. Con lo que compremos y adquiramos de misiones secundarias podemos decorar el valle a nuestro gusto, recreando zonas inspiradas en películas o simplemente ajustándonos a la estética que queremos aportar. Cualquier mueble se puede poner en el mapa, y el límite de objetos es bastante generoso. Y sumad vuestra casa: podemos tener decenas de habitaciones para decorar libremente, e incluso si queréis varios hogares propios con diferentes estéticas para colocar en el vecindario.

La personalización es un fuerte punto de 'Disney Dreamlight Valley' y compararlo con los valles de otros jugadores es una delicia. Aquí el modo multijugador podría haber brillado por básicamente recrear mundos enteros y compartir experiencias con amigos. Por desgracia, se queda en lo básico: puedes ir con un amigo a su valle... y nada más. No puedes completar misiones, recoger materiales o ayudaros mutuamente a decorar. Ni siquiera puedes hacer fotos, la función más simple del juego.

Pero este problema es uno que quizás esté desactualizado para cuando leáis este artículo. He mencionado antes que el juego se planeó como un Free to Play y, por mucho tiempo, ha sido un título en early access con pase prémium. Eso ha significado un gran número de actualizaciones que ha ido cambiando el panorama, y para el futuro próximo no van a parar.

'Disney Dreamlight Valley'

Con la mirada en el futuro

La verdad es que este análisis de 'Disney Dreamlight Valley' es incompleto. Sólo tiene en consideración el juego en su versión de lanzamiento 1.0 y no todos sus planes en adelante. Para la primera mitad de 2024 se agregarán más vecinos, reinos Disney como 'Monstruos S.A.' y trajes opcionales para los personajes. Todo ello gratis.

Hay un componente de pago con un pase de batalla que agrega misiones en forma de acertijos y recompensa con muebles y trajes. Sin embargo merece destacarse que es de un bajo coste y, más importante, se puede adquirir en el propio juego con actividades diarias o el desafío semanal en línea de DreamSnap, que nos propone sacar creatividad y hacer buenas fotos temáticas a nuestro mundo y personajes. Esta última función une bastante a la comunidad y saca el lado más creativo de los jugadores de una manera relajante y con premio garantizado gracias a que da un gran número de monedas virtuales. Los objetos de pago de la tienda en línea, sin embargo, sí son algo más caros y piden la cartera por delante.

Y nos dejamos lo mejor por delante. Al pasar a título prémium 'Disney Dreamlight Valley' toma la decisión de agregar más escenarios, personajes e historias a través de expansiones de pago, la primera de ellas 'A Rift in Time'. No aportaremos aún nuestro análisis de este porque le quedan dos actualizaciones de contenido en los próximos meses, pero sí adelantamos que tiene un magnífico arranque y aporta mucho a la experiencia de juego. Esperemos que no sea el único DLC de calidad que veamos.

'Disney Dreamlight Valley'

Conclusiones

¿No se nota la ilusión que nos ha irradiado 'Disney Dreamlight Valley' en las más de ciento cincuenta horas que hemos jugado antes del análisis? Pues que el número de horas hable por sí mismo. Tiene lo mejor de 'Animal Crossing' mezclado con las franquicias Disney y un toque de trauma con excelentes guionistas detrás de las cámaras. Es una fuerte recomendación para los más pequeños de la casa, y también para los adultos que han crecido con la gigante de la animación. Quizás no tanto para los adolescentes en busca de oscuridad y violencia.