SIN VICISITUDES FAMILIARES

'Star Wars' sin los Skywalker. ¿Qué podemos esperar de la próxima trilogía?

Otro rincón de la galaxia podría arrojar información nueva sobre la fuerza, otras fuerzas políticas, héroes y enemigos.

Por José Antonio Rodríguez Gómez 11 de Noviembre 2017 | 10:27

En una galaxia muy muy lejana... existen zonas sin explorar aún. Planetas enteros, quién sabe si civilizaciones que hasta la fecha no han sido reflejadas en ninguno de los filmes de la saga que nos ocupa, que por supuesto no es otra que 'Star Wars'. Creada por George Lucas, tuvo una magistral primera trilogía, una irregular segunda (que funcionó como precuela), una que se está desarrollando en pleno siglo XXI y de la que hemos visto solo el primer filme - el segundo llega el mes próximo - y ahora sabemos que habrá una nueva, que irá llegando la próxima década.

En plena efervescencia de noticias sobre 'Star Wars', que también llegará en forma de serie a la plataforma de vídeo bajo demanda de Disney, ya se ha hablado de que la nueva trilogía abandonará - por fin - el centro argumental de la historia, que hasta ahora ha venido "vertebrada" por la familia Skywalker. No necesitan presentación de ningún tipo, así que no vamos a ahondar en Anakin, Luke, Leia y aledaños (tampoco nos vamos a centrar en Darth Vader, porque ya resultaría especialmente repetitivo hablar siempre de lo mismo). En su lugar planteemos que ahora nos vamos a centrar en otra zona de la galaxia (muy muy lejana, siempre). Pero aquí viene la auténtica pregunta, ¿y temporalmente? ¿Donde estaremos?

¿La hora de los caballeros?

Siempre hablando sobre las entregas numeradas, tenemos la trilogía de Anakin, que a través de 'Rogue One' se conecta con la de Luke Skywalker, que pasa a conectarse con la trilogía de Rey y Finn. Están separados por décadas, pero no lejanos. No son pocos los que en medios muy sonados de Internet como Comicbook han llegado a plantear que podríamos estar ante la auténtica llegada de la adaptación de lo que los gamers conocemos como 'KOTOR' ('Knights of the Old Republic'), o lo que es lo mismo: 'Caballeros de la Antigua República', un par de juegos de rol y acción que aparecieron en Windows (y posteriormente en Xbox) que se centraban en combatir a los Sith (o jedis conversos) y que utilizaban las reglas propias de la tercera generación de 'Dungeons & Dragons'. El hecho de que el jugador pudiese decantarse por decisiones hacia el lado oscuro o el de los jedi hace de la "bilogía" una perfecta excusa para ahondar en el mundo de los Sith.

Un nuevo entorno

Pero ahora planteemos que no sea así y que en su lugar vamos a trasladar a otra zona, a un nuevo conflicto (porque sin conflicto, no hay 'Star Wars'). Amén de poder plantearnos otra guerra, esta no tendría por qué ser contra el Imperio, sino que aún estando en el mismo universo, plantearía un nuevo escenario, nuevos participantes, e incluso, por primera vez, podría jugar de verdad a dos bandas. El espectador podría decantarse por el "lado" que quisiera, y con un estilo narrativo y de combate propio de la saga, mostrar otra situación nueva pero que, en algún punto, se conectase con lo que ya conocemos. Y es que quien suscribe se niega a pensar que en alguna de las tres películas no veamos el necesario guiño a la saga principal, que haría las veces de "ancla" para los espectadores. No obstante, pongamos los pies en la tierra: Disney sigue siendo la que manda aquí.

Con esto no queremos decir nada malo, pero sí que todo argumento, por oscuro que sea, siempre tendrá un "tope". Algo que no celebramos, pero que contemplamos. 'Rogue One: Una Historia de Star Wars' sirvió para mostrar un nuevo entorno con conexiones a lo conocido, aunque algunos de esos elementos (como Guerrera) tuviesen su origen en líneas argumentales externas a la saga principal. Es el caso de los que salían de la serie 'Clone Wars'. Fue además la oportunidad de que un conjunto de personajes que podemos entender como "de varias razas" se uniese a la acción, algo que en cierto modo ya empezó a marcar el 'Episodio VII'.

Lo que sí está bastante claro es que alejarse de la familia Skywalker puede conllevar interesantes beneficios, al no estar la trama sujeta a algo que el público ya conoce. Aún cuando casi podemos apostar porque habrá rebeldes, facciones y diferentes situaciones que nos resulten medianamente familiares, todo podría ser nuevo, y es un entorno de lujo para dar rienda suelta a la imaginación de guionistas y directores, y mostrar 'Star Wars' de una manera que hasta ahora no acostumbramos. La gran pregunta es, ¿veremos jedis? Lo obvio sería que sí, sin embargo, ahí la línea temporal podemos decir que se tambalea. Porque entonces, o lo situamos en otra línea diferente de la actual, o no tendrá sentido lo de 'Los Últimos Jedi'.

Es cierto que esto puede provocar una mezcla de entusiasmo - por saber que no vamos a tener que esperar mucho los próximos años para seguir disfrutando de Star Wars - y de temor, porque se esté explotando demasiado la franquicia. No obstante, que nadie se alarme más de lo debido. El anuncio de que el argumento irá por otros derroteros es de por sí positivo. Pero ahora que además ya hay director para la primera entrega (Rian Johnson, el mismo encargado del 'Episodio VIII: los Últimos Jedi'), lo primero debe ser valorar su trabajo en la próxima entrega, que se estrenará el 15 de diciembre. Y para eso falta poco más de un mes.

Que la fuerza nos acompañe, estemos en el lado de la galaxia que estemos.