LA ZONA

Decálogo del Día de los videojuegos: 10 cosas que los videojuegos deberían ser y no son - La zona

Hoy celebramos el Día de los videojuegos, otra fiesta más creada por internet.

Por   29 de Agosto 2016 | 18:13

Hoy es el Día de los videojuegos, y el esnobismo congénito repiquetea diciéndome que remarcar un día como este es una estupidez. He decidido desoír a la sabihonda voz de la conciencia, porque es bonito que celebremos con un día una afición, y mucho más bonito desde que Twitter existe y podemos utilizar la almohadilla del teclado por fin para algo. Compartir aficiones con la gente es una de las acciones sociales más gratificantes que existen; recrearse con un grupo en algo común, que pueden ser los videojuegos como cualquier otra cosa, sube el autoestima de los implicados de manera recíproca de una forma bien sanota. Pero si bien el grueso de la comunidad de videojugadores es divertida, pasional y sana, también hay una parte muy tóxica y fácil de identificar. Los haters o los fanboys, que son la misma cosa, y deberíamos abolir en lugar de "likear" en YouTube.

Sin más, hoy la red se llenará de recopilatorios de juegos, de sagas, de recuerdos, de memorias... yo prefiero llenarla con un decálogo, que parece que viste más:

10 cosas que los videojuegos deberían ser y no son:

1. Los videojuegos deberían ser un bien de consumo cultural reconocido, y no lo son.

2. Por eso los videojuegos deberían estar en "bibliotecas públicas", y no lo están.

3. Los videojuegos deberían ser autoconscientes de su mensaje ideológico, y creo no lo son.

4. En los videojuegos deberíamos reconocer a los autores por encima de las empresas, y no lo hacemos.

5. Los videojuegos deberían poder mostrar desnudos como elemento narrativo, y no lo hacen.

6. Los videojuegos de plataformas deberían poder volver a ser valorados en las listas de premios, pero no creo que eso vuelva a pasar jamás.

7. Los periodistas y los jugadores deberíamos hablar más de ideas y menos de gráficos.

8. Los videojuegos deberían ser cada vez más baratos, pero son cada vez más caros.

9. Nunca más deberíamos llamar a la creación de los videojuegos "industria".

10. Los videojuegos deberían representar la igualdad de género, y tristemente no lo hacen.