LA ÓPERA PRIMA DE YUJI NAKA

RETRO 'Girl's Garden', analizamos el primer juego del creador de Sonic para la primera consola de Sega

Podría tratarse de un original juego Indie de hoy en día, de no ser porque salió a la venta hace más de 30 años.

Por Alberto Carmona 11 de Enero 2015 | 18:47

No es poca la gente que se sorprende al saber que Master System no fue la primera consola de Sega, rara vez vais a ver a nadie hablando de este desconocido sistema nacido nada menos que en 1981 y que fue llamado "SG 1000". Curiosamente esta consola no pudo ser lanzada al mercado nipón hasta el 15 de julio de 1983, exactamente el mismo día en el que Nintendo sacaba a la venta su Famicom. En sus escasos dos años de vida, SG 1000 atesoró un aceptable catálogo de juegos muy de la época con alguna que otra joya oculta. Hoy toca hablar de una de estas joyas, un título que rebosa originalidad llamado 'Girl's Garden'.

"¡Es mío mala pécora!"

Papri es una chica joven y alegre que vive despreocupada en el campo, le encanta la naturaleza y salir a pasear al aire libre. Pero su gran pasión es Minto, el simpático muchacho con el que Papri sueña cada noche. Minto vive su vida campestre sin preocuparse por amoríos, por lo que deberá ser la muchacha quién despierte los instintos amorosos del joven si quiere ser feliz junto a él. Papri sabe que a Minto le encantan las flores, por lo que sale al campo a recolectar las más bellas para regalárselas y así acercase a él. ¡Pero alguien más ha tenido la misma idea! ¡Esa lagartona de Cocco quiere robarle el amor de Minto! Papri no dejará que Cocco se interponga entre ella y su amado, así que es hora de salir al campo a buscar flores. ¡Sin importar que estemos en plena época de osos hambrientos!

Si este juego hubiese salido a la venta en la actualidad, habría sido calificado como una original propuesta de esas a las que hoy en día ya solo nos tienen acostumbrados los juegos Indie. Así que si incluso en la actualidad resultaría original, imaginaos en 1984 cuando salió a la venta. No cabe duda de que estamos ante un producto muy japonés, es decir, raro. Pero al margen de su temática, no le falta esa capacidad de enganchar con muy poco que tenían los juegos de entonces, por lo que resulta bastante adictivo.

La mecánica es muy sencilla, nuestro objetivo en cada nivel es recoger 10 flores por el campo y llevarlas después hasta la casa de Minto. Sin embargo no será tan sencillo como pueda parecer, pues para empezar tendremos que esperar a que las flores nazcan y crezcan de forma aleatoria por todo el nivel. Si las recogemos demasiado pronto en forma de capullos, no contarán. Y si esperamos demasiado se marchitarán y arruinaran el ramo que preparamos para nuestro amado, restándonos flores del contador.

Para colmo habrá que hacer frente a los peligros propios del campo, como lagos y ríos en los que podemos caer y ahogarnos, o los hambrientos osos que pululan por la zona. Para defendernos de los úrsidos portamos algunos tarros de miel que podemos dejar para que se los zampen y así estén un rato entretenidos, pero estos tarros son muy limitados, de modo que habrá que usarlos con cuidado.

The power of love

Si recibimos un solo impacto perderemos uno de los corazones de nuestro indicador de amor. Si, aquí los corazones no representan la salud, si no el amor que Papri siente por Minto, originalidad al poder. Toda la acción se percibe desde arriba con una perspectiva aérea, y nos desplazamos evitando rocas, troncos, y demás elementos propios del campo.

Por los escenarios suelen revolotear abejas, pero estas no actuaran como enemigos, si no como aliados. Las abejas dejarán caer objetos de ayuda, aunque a veces dejarán tras de sí calaveras que deberemos evitar. Estas abejas también se suelen posar en las flores, y si recogemos la flor cuando la abeja este posada en ella, conseguiremos más miel para distraer a los molestos osos.

Para cada fase disponemos de un tiempo limite, que es lo que tardará la pérfida Cocco en robarnos a nuestro hombre, esto se ve representado arriba por un marcador que muestra como Minto se aleja de Papri. Cada cierta cantidad de niveles podremos acceder a fases de bonus en las que deberemos saltar osos, lo que ayudará a aumentar nuestra puntuación, cosa que era lo más importante en los juegos de antes a fin de fomentar el pique con otros jugadores.

Como veis la mecánica de juego no puede ser más sencilla, pero entonces no hacía falta mucho más. La original temática es un complemento añadido para darle interés, así como también lo son sus coloridos gráficos y su animada banda sonora. Todo esto redondea un juego muy simpático que acaba resultando encantador a la par que divertido, por lo que no esta de más que le echéis un vistazo. Así además indagareis sobre una página importante sobre la historia de Sega, por motivos que explicamos a continuación.

El nacimiento de una fructífera relación

Y es que 'Girl's Garden' fue el primer juego que hizo Yuji Naka para Sega, recordemos que este señor crearía años más tarde a Sonic, y dejaría en la azulada compañía muchas otras grandes franquicias como: 'Phantasy Star', 'Ristar', 'Nights', o 'Chu Chu Rocket!' por citar solo algunas. Ya con este título Naka dejó claro que era un desarrollador excepcional al que le encantaban las propuestas originales y sobre todo coloridas.

Lamentablemente Naka dejó Sega en 2006, después del accidentado desarrollo de 'Sonic the Hedgehog' para 360 y PS3. Tras esto el brillante creativo nipón fundó su propio estudio llamado "Prope", pero siempre ha seguido ligado a Sega de una forma u otra. Su colaboración más reciente ha sido en la exitosa serie de animación nipona "Sega Hard Girls", donde se rinde homenaje a toda la historia de la compañía desde un punto de vista totalmente desenfadado. El propio 'Girl's Garden' se ve homenajeado en dicha serie, con la aparición de Minto como pretendiente de una de las simpáticas Sega Hard Girls.

A parte de este curioso cameo en dicha serie, Sega parece haberse olvidado de este titulo y con él de SG 1000 y todo su catálogo. No encontraréis reediciones de sus juegos ni nada parecido, por lo que la única manera de conocer este sistema y juegos como el que hoy analizamos, es tener la consola original (bastante difícil de conseguir), o apelar a la emulación. Sega podría (y debería) haber aprovechado la Consola Virtual para dar a conocer a SG 1000 al mundo, pero por desgracia no ha sido así por el momento.

Ojala que Sega saque del baúl de los recuerdos algún día todas estas joyas que atesora, pero mientras tanto se agradece que aun se acuerden de ellas aunque sea en forma de cameos en sus series, algo en lo que a Sega parece estarle yendo bastante bien últimamente. ¿Volverá Yuji Naka algún día a Sega? Quién sabe, pero mientras podéis ir rindiendo homenaje a su extensa obra que cuenta con grandes juegos populares, y otros no menos grandes pero más desconocidos como este 'Girl's Garden'.