JUSTICIA PARA PHOENIX

Análisis de 'Ace Attorney Trilogy' para PS4, regreso a los juzgados

Los casos más extravagantes del abogado defensor número uno llega por fin a toda clase de usuarios con un recopilatorio especial.

Por Daniel G. Astarloa 9 de Abril 2019 | 10:00

Ser un abogado defensor no suena especialmente emocionante en el mundo de los videojuegos. Sólo protegemos con justicia y verdades como puños a nuestros clientes: no hay peleas violentas en las que abrirnos camino a base de choques de mentes, puzles extraños que resolver o siquiera momentos en los que poner a prueba nuestros reflejos. Es extraño lo bien que le funciona la fórmula a Capcom, que ya ha sacado ni más ni menos que ocho entregas principales de la saga con este concepto además de dos spin offs y un crossover con el buen Profesor Layton.

¿Cómo ha podido funcionar durante tanto tiempo algo tan diferente y extraño? Para aquellos que hayan crecido fuera del ámbito nintendero es complicado llegar a imaginarlo. Es ahora, tras dieciocho años desde el lanzamiento de la primera entrega, cuando por fin pueden disfrutar de las bendiciones del poder de la abogacía los usuarios más alejados de las portátiles nintenderas. 'Ace Attorney Trilogy' nos acerca a las tres primeras entregas, aquellas protagonizadas por Phoenix Wright.

Se levanta la sesión

La trama de 'Ace Attorney' es compleja, llena de giros inesperados y personajes de locura que parece que busquen dejarnos con la boca abierta más de una vez. Seguimos de cerca los casos del abogado defensor Phoenix Wright, quien acompañado de su leal compañera Maya Fey decide defender en el juzgado a aquellos cuyos juicios parece que se precipitan al veredicto de culpable de forma directa. A él le acompañan decenas de personajes recurrentes que aparecen varias veces a lo largo de la trilogía, desde el amable aunque no muy espabilado detective Gumshoe o nuestra maestra y figura a seguir, Mia Fey. Son estos los que dan vida a cada capítulo y lo llenan de humor, drama y misterio.

Pero igual de interesantes o más son nuestros contrincantes. Los fiscales representan ser los principales obstáculos en nuestro camino: grandes enemigos que no buscan la justicia y la verdad, sino la victoria y dejar sus historiales de casos vencidos impoluto. Cada juego se centra en uno diferente, con Miles Edgeworth como el primero y más gris de todos, quien camina entre una fina línea de matices que se profundiza en los siguientes juegos; Franziska von Karma, una joven de armas tomar que no tiene reparo alguno en atacarnos físicamente si hace falta para tener la razón; y el misterioso Godot, un dios del café resulta ser el más demoledor y astuto de los tres, decidido a destrozar a Wright en una vendetta personal por motivos ocultos. Los tres demuestran ser los mejores personajes de cada una de las entregas, especialmente en lo relevante a Edgeworth, quien crece y madura junto con Phoenix como su principal rival.

Pero por supuesto, ninguno lograría destacar tanto si no tuviésemos un protagonista potente y carismático. La trilogía reúne los primeros tres años de Phoenix Wright como abogado, desde sus primeros pasos hasta el último enfrentamiento que mantiene con Godot. Es el camino hacia la grandeza que le convierte en un auténtico abogado que merezca la leyenda que crece a su alrededor de cara a futuras entregas, sin acelerarse ni tampoco sentirse lento. Al final de la primera entrega aún necesita ayuda aunque sea capaz de valérselas él solo, y en la segunda empieza a comprender el auténtico significado y coste de su oficio. Es cuando terminamos 'Ace Attorney: Trials and Tribulations' cuando somos conscientes de su desarrollo y cómo se ha transformado en un auténtico abogado, una evolución sublime.

Puede comenzar su interrogatorio

En lo que se refiere a jugabilidad no encontraréis nada sustancial en ninguna de las entregas de 'Ace Attorney Trilogy'. La lectura y la deducción son nuestros principales mecanismos para avanzar en cada capítulo, los cuales se dividen en dos secciones: investigación y juicio. En la primera parte debemos encontrar pruebas y analizar los escenarios de los crímenes que se han cometido, así como interrogar a nuestros clientes y posibles testigos que nos encontremos por el camino. Son de una estructura convencional y en ocasiones algo más aburrida en comparación con lo que sucede en los juzgados, pero sirve para sentar los precedentes de lo que veremos más adelante.

Es en los juicios donde se encuentra la auténtica miga de la saga. Aquí es donde debemos mostrar nuestras auténticas cualidades como jugadores, buscando las contradicciones de los testigos y sorprendiendo al jurado con nuestro conocimiento del crimen mejor que ninguno de los presentes. En ocasiones podemos sentirnos algo atascados al no encontrar problemas en los testimonios de quienes se suben al estrado, pero al final siempre conseguiremos salir del paso con nuestra lógica.

A partir del segundo juego, de hecho, la sección de investigación se refuerza metiendo un poco de presión traída de los juicios gracias al poder del magatama. Con este objeto podemos percibir las mentiras de los testigos fuera de los juzgados y su determinación para guardar los secretos que ocultan con ahínco. Con pruebas y perfiles de nuestro lado tendremos que romper las cerraduras mentales que nos impiden alcanzar la verdad, dinamizando la investigación y aumentando nuestro interés por descubrir todo lo relacionado con el caso que investigamos.

Un testimonio irrefutable

Además de disfrutar de una trama estupenda el juego se deja llevar por una banda sonora que, en otras circunstancias, podríamos catalogar de magnífica. El trabajo que hicieron maestros como Masakazu Sugimori y Noriyuki Iwadare merecen un fortísimo aplauso por parte de los jugadores de todo el mundo, ya que crearon temas tan icónicos como el bien conocido Cornered o The Fragrance of Dark Coffee. Pero es esta banda sonora lo que más me duele de este recopilatorio: si se ha remasterizado el apartado visual para darle una calidad HD a cada uno de los modelados y fondos que vemos, ¿por qué no se ha aprovechado para elevar de la misma forma los fantásticos temas musicales?

Siguen siendo brillantes en su composición, pero tras haber escuchado en conciertos simfónicos oficiales de Capcom cómo estas melodías ascienden a un nuevo nivel es difícil imaginar por qué no se aprovechó la oportunidad para traer una mejor calidad sonora al título en su paso a nuevas plataformas. En su lugar continuamos teniendo los mismos archivos MIDI de Game Boy Advance que, aunque funcionaran correctamente en su momento, no responden a las inquietudes de un jugador actual. Era el aspecto que más necesitaba cambiarse de toda la trilogía.

Existe además un inconveniente para el público español. Los tres juegos han perdido tanto la traducción como el doblaje que una vez tuvimos en los relanzamientos para Nintendo DS, devolviéndonos así al perfecto inglés que también caracterizan a la quinta y sexta entrega. Las circunstancias alrededor de esta decisión son complicadas y es fácil entender por qué hemos perdido uno de los elementos que permitía la accesibilidad sencilla y directa al gran público, pero se trata de una pérdida dolorosa al tratarse de una novela visual donde el noventa por ciento del tiempo nos dedicaremos a la lectura.

Veredicto

'Ace Attorney Trilogy' es la oportunidad perfecta para aquellos que no han podido disfrutar de la saga antes de poder entrar a conocerla de una vez por todas. Quitando la problemática en torno a la traducción del juego, incluye todo lo que podríamos desear: nivel artístico mejorado, mayores planos y unos menús más controlables y bien presentados que en otras versiones. Quizás un cambio en la banda sonora habría mejorado el producto final, pero los amantes de los sonidos MIDI podrán disfrutarlo en su versión original. Ahora la pregunta es, Capcom: ¿llegará la trilogía de Apollo Justice próximamente a nuestras consolas?