Audiencias 'Supervivientes' sube con su cambio de día y lidera frente al bajón de 'Hermanos'

La animación de 'Dragon Ball Super' es mala, pero no es un caso único - Outside Zonared

NUNCA FUE BUENA LA ANIMACIÓN

Por Benjamín Rosa Fernández

El 19 de Marzo 2016 | 12:00

Usando la serie como referente de la mala animación japonesa, contamos los problemas que padece el sector.

La semana pasada fue el trigésimo aniversario de Dragon Ball, una de las series de animación japonesa que más marcaron a una generación a nivel mundial, y mi compañero Xose Llosa me animó a escribir sobre ella en el Outside Zonared de ésta semana. Se podría decir que tenemos una generación que ha crecido junto a Goku y sus amigos, y aunque admito que de pequeño me sentí ligeramente interesado en la serie, nunca me metí mucho de lleno como hice con otras. Apenas reconocía a los personajes fuera de los principales y fue una serie a la que acabé por coger manía porque a día de hoy veo a mucha gente emocionada y loca por sus videojuegos, películas y nueva serie y yo soy incapaz de encontrarle el atractivo más allá de la sensación de acción juvenil.

Una mala animación generalizada

Pero no me dejan éste espacio para comentar mi animadversión contra la obra más famosa de Akira Toriyama, por lo que vamos al tema en cuestión de éste Outside Zonared que requiere de algo de presentación. He llegado a ver gente que nunca antes había usado un fansubs para bajarse una serie con audio japonés y subtítulos al español, de treinta años aproximadamente, que lo hizo para poder disfrutar semana tras semanas de Dragon Ball Super. Pocas semanas tardaron en aparecer infinidad de noticias en todo tipo de publicaciones sobre la mala animación que tiene Dragon Ball Super en su quinto capítulo, o cómo se mejorará la misma en los Blu-Rays y DVDs. Pero... ¿y si os digo que eso es lo más normal del mundo en el sector de la animación japonesa? De eso trata el Outside Zonared de ésta semana, de cómo la calidad de la animación japonesa siempre ha sido mediocre debido a su propia naturaleza televisiva, usando Dragon Ball Super como principal ejemplo.

¿Por qué es tan mala la animación en el anime?

En primer lugar, no pongamos en el mismo saco toda la industria de la animación japonesa, cuando no toda se crea bajo el mismo patrón. No todas las series trabajan bajo el acelerado ritmo de animarse al ritmo televisivo de forma que hay cuatro capítulos que están siendo animados a la vez; y mucho menos las películas de animación japonesa dado que es un equipo que tiene más presupuesto, exigencias y tiempo.

Una mala animación generalizada

Para entender cómo es que una serie de animación de televisión tiene unos resultados tan malos hay que dar una gran marcha atrás e irse a los inicios de la animación y de las formas de abaratar los costes de producción para sus grandes productos. Desde los propios inicios de la animación se empezaron a hacer populares las técnicas de animación limitada para que resultara más barato, ya con las grandes producciones cinematográficas de Disney o de United Productions of America. Ahí es cuando entra en escena Mushi Productions, la productora de Osamu Tezuka que popularizó las técnicas de animación barata para adaptarse al mercado televisivo japonés y sus presupuestos reducidos que dieron origen al anime que tenemos hoy en día, con lo que en realidad la palabra anime se puede decir que es la animación limitada japonesa.

De ahí sacamos los personajes estáticos, animación cíclica y fondos abstractos que podemos ver en casi cualquier anime para televisión para así hacer más fácil y barata la animación, junto con las técnicas para hacer que pareciese menos barata, como dar libertad de estilo a los animadores para darle a las series un toque característico mientras se acelera su producción, o el uso de un lenguaje visual avanzado para sacar metraje de la nada al enfocar expresiones o planos de paisajes u objetos en concreto. Sacando la idea del canal de Youtube Animación Artesanal, propongo a cualquiera que me esté leyendo que coja un capítulo de una serie de anime de acción popular y se ponga tan quisquilloso con la animación como lo han sido con Dragon Ball Super, y vea cuánta animación real hay en un capítulo, cuantos diálogos sobre fondos estáticos o cuánto se alarga un plano fijo. Os sorprendería cómo se abusa de esos trucos para sacar animación de donde sea y muchos no se dan cuenta de ello.

Artículos recomendados